BUENOS AIRES- Supo estar nominado al Oscar y actualmente es uno de los actores más reconocidos de Hollywood. Llegó a Buenos Aires para presentar el último film en el que trabajó como protagonista: "[i]Entre la vida y la muerte[/i]", un Western que promete.
Sin embargo, anoche, en el programa de Mariana Fabbiani, RSM, Viggo Mortensen estuvo entre San Lorenzo y San Lorenzo. Sólo del club de sus amores quiso hablar durante los 25 minutos que aproximadamente duró la entrevista.
A pesar de que intentaron consultarle sobre los entretelones de la película y también acerca de sus otras pasiones (pintura, poesía y fotografía), Viggo tenía el vocabulario teñido de azulgrana. Contento con el andar del equipo (los jugadores le regalaron una camiseta autografiada), RSM le preparó algunas sorpresas, como un video con sus otras visitas a la Argentina, en las cuales también mostró su orgullo cuervo.
"Me acuerdo muchos de los Carasucias, del Bambino Veira, el loco Doval, pero creo que el mejor equipo de la historia fueron los Matadores del 68", opinó el actor de una "[i]Historia Violenta[/i]". Inmediato a sus declaraciones, aparecieron varios integrantes de aquel equipo que, hace 40 años, se coronaba campeón metropolitano de forma invicta.
Calics, Villar, Telch, Butticce (un poco entusiasmado y hasta comedido con la conductora), Fischer, Albretch, Irusta y Rosl fueron los que agasajaron al embajador del Ciclón con otra casaca azulgrana, aunque esta con el "40" en la espalda. Contento como un nene, Viggo destacó: "Si miramos el torneo actual, más allá de San Lorenzo, estos señores -por los campeones del 68- tienen más vida que todos los demás equipos".
Por último, comentó que no sabe si irá a ver al Ciclón contra San Martín de Tucumán, pero sí afirmó que este sábado alentará en el Monumental a la Selección Nacional. Fabbiani, entre otras cosas, le recomendó comprarse una casa en el país. Y Viggo, no dudó: "Sí, me la voy a comprar en Boedo". Un Oscar en fanatismo.
