BUENOS AIRES- Muy buena persona, cordial, amable, siempre dispuesto. Así se mostró Angelito Spadafore por todos los lugares que supo transitar.
Querido y respetado por toda la familia sanlorencista, ayer festejó su cumpleaños número 100 rodeado de sus afectos. A pesar de estar internado en la Clínica Favaloro, reponiéndose favorablemente de una reciente intervención quirúrgica, Ángel se pudo dar el gustazo de recibir a algunos jugadores, directivos, compañeros de trabajo, y amigos de toda la vida que pasaron a saludarlo.
Integró en su juventud el equipo de Reserva de San Lorenzo, luego siempre estuvo ligado al deporte. Fue cultor del fútbol, el boxeo y la gimnasia. Y luego ya sí, se dedicó de lleno a trabajar como masajista de los distintos equipos de fútbol del Ciclón.
Lo supe saludar muchas veces, ya que somos vecinos del mismo barrio de Boedo, en su tradicional caminata hasta la Ciudad Deportivo a diario. ¡Sí con noventa y tantos años, Angelito seguía caminando hasta llegar al Club!
En una visita a su casa realizada hace unos meses, supimos charlar con Ángel y expresaba su deseo de llegar a esta fecha. "Ojalá Dios me dé salud para festejar como el Ciclón mis primeros 100", nos decía ansioso y emocionado. Y el de arriba escuchó sus palabras e hizo que el 9 de octubre de 2008 marque a fuego en su vida este momento único en lo afectivo.
En nombre de todos los que hacen
Mundo Azulgrana, me toca a mí saludar a Angelito en este día. Los deseos de seguir charlando con él del querido Ciclón son permanentes y duraderos y el ejemplo de su persona nos invita a seguir su prédica.
¡Feliz Cumple, Ángel y por otro Centenario!
Nota: Favio Marrazzo
favio@mundoazulgrana.com.ar