Los pobres de Quilmes golearon a los ricos de San Lorenzo
Con actitud, amor propio y goles, el Cervecero que hace 4 meses no cobra y llegó al partido sin concentrar, se floreó ante su gente con un 3 a 0. El equipo de Guede en deuda: 8 partidos sin ganar.
Blandi tuvo el empate, pero su cabezazo se fue por arriba.
Los primeros 45 minutos fueron intensos, de ida y vuelta, donde San Lorenzo se llevó la peor parte porque a los 16 sufrió el gol de Rescaldani, de tiro penal.
El árbitro Herrera sancionó bien el penal por mano de Cerutti, pero anteriormente obvió una falta sobre Blandi dentro del área, que podía haber sido el primer gol del partido.
Desde ahí, el Ciclón se volvió loco y no pudo hacerse dueño del partido, y Quilmes, que a pesar de sus problemas económicos, mostró mucha actitud y temple para ser un poco más que el equipo de Pablo Guede.
La segunda parte fue una pesadilla, porque los desconcentrados y endeudados de Quilmes le dieron una lección de ganas y cómo jugar un partido de estas características.
A los 8 minutos Orihuela, de cabeza, estiró la diferencia. Seis minutos más tarde, tras un error de Caruzzo y una tapada de Torrico, Rescaldani volvió a marcar con la cabeza.
Con el 3 a 0, Guede metió dos variantes (mandó Matos y Villalba a la cancha, por Ortigoza y Cauteruccio). Pero el Ciclón no sopló y entró en una meseta que despertó la angustia y preocupación de todos los sanlorencistas.
Ahora, con este resultado, San Lorenzo quedó lejos de la punta y sumó su octavo partido sin triunfos entre el torneo local y la Copa Libertadores. Quilmes, por su parte, ganó su primer partido oficial del año.
Situación complicada la del Ciclón, obligado a ganar en México por la Copa y alejándose de los puestos de vanguardia en el Torneo Local. Aún, a Guede, lo respalda el 4-0 con Boca para ganar la Supercopa Argentina. Pero la paciencia tiene un límite.
