Un viejo conocido de la casa que le tiene fe al Bolívar

Jugadores que vienen y se van. Algunos quedan en el recuerdo y otros, simplemente, en el olvido. Épocas en las que San Lorenzo incorporaba refuerzos sin un criterio definido. Incorporaba por incorporar. Así llegó el delantero boliviano Joaquín Botero al club. Y así se fue.

Presentado como un peligroso artillero, Botero fue contratado en el mercado de pases invernal de 2006, momento en el que también se sumaron a la institución Roberto Jiménez, Santiago Hirsig, Claudio Husaín, Cristian Tula, Pablo Quatrocchi y Andrés Silvera. En sus primeros días en el Ciclón, el delantero boliviano coincidió con el hoy nuevamente jugador azulgrana Pablo Barrientos, que en ese mismo mercado terminaría en el fútbol de Rusia.

Sin llegar a una decena de partidos jugados, y habiendo anotado solo un gol, Joaquín Botero se despidió de San Lorenzo y no dejó una buena imagen. Pero en el Bolívar, rival de Boedo en la semifinal de esta Copa Libertadores, fue donde más se destacó y quedó para la historia como el tercer máximo goleador del equipo.

El diario La Razón de Bolivia lo entrevistó para que diera su opinión, tras la goleada de San Lorenzo por 5-0, y Botero reveló que le tiene fe al conjunto que será local el próximo miércoles en la altura de La Paz.

-¿Cómo ve la situación de Bolívar?
-Será un partido difícil, complicado, porque con cinco goles en contra no es normal. Creo que Bolívar tiene un buen equipo y jugando en La Paz puede ganar, seguro, pero ahora debe intentar golear.

-¿Es posible hacer cinco?
-Sí, por supuesto. Cuando estaba en Bolívar hace años perdíamos con el Paranaense y pudimos empatarlo –1 a 5; 5 a 5-. Ellos seguro vendrán a meterse atrás y a contragolpear. Está difícil, pero no imposible, hay equipo para seguir en carrera.

-¿Qué cree que pasó?
-Bolívar venía jugando bien, pero la pausa le hizo daño y le favoreció al rival. Ese receso pesó, le quitó ritmo y viendo el partido, creo que San Lorenzo no fue grandemente superior, los goles fueron pelotas paradas.

-¿Cómo aprovechar la localía?
-Al máximo, primero que ellos ya llegan muertos, no quieren saber de la altura. Entonces nosotros tenemos que correr, presionar, desgastarlos, patear de lejos y marcar. Si se anota al inicio, puede abrirse.

-¿Cómo puede el equipo levantarse en lo anímico?
-No es fácil, pero tiene que hacerlo, porque esto es fútbol y todo puede ocurrir. Aún tenemos que pensar en pelear y soñar con la final. No podemos dejarnos vencer.

-¿Qué recuerda de su paso por San Lorenzo?
-Jugué en 2007 (N de E: llegó en agosto de 2006), fue muy interesante, aprendí bastante, desde luchar siempre, en la cancha y en la tribuna. Por eso la afición en La Paz igual debe apoyar, tiene que ir al estadio. Los argentinos apoyan a sus equipos así pierdan goleados.